Se aprobó el 8 de noviembre de 1991, con la finalidad de erigir colegios católicos, a su cargo D.ª Concha Hervás, la que había sido largos años presidenta de la Asociación Católica de Maestros de Valencia y a su vez, hija del primer presidente Don Vicente Hervás en proceso de beatificación.
ORIGEN
Las múltiples crisis que sufre el mundo se resumen en una sola: la crisis del hombre.
San Juan Pablo II, nos dirigió estas palabras:
“La educación religiosa es el cumplimiento y el fundamento de toda educación que tiene por objeto (como dice vuestra Constitución)el pleno desarrollo de la personalidad humana”
Así, el maestro, transmite ciencia, conocimiento de sí mismo, su propia dignidad, todas sus responsabilidades morales y civiles…
La Fundación pretende la libertad de enseñanza y una escuela en libertad. La iniciativa de Dª. Concha Hervás era fundar un colegio desde el cual, desde una educación en libertad, educar a los niños en el calor de unos valores que en su día, les prepare para saber discernir, para poder elegir y en definitiva, para desde su opción, poder construir un mundo mejor. No sólo se trata de educar en valores, sino de educar desde los valores, así la fundación intenta recuperar el nexo entre el educador y el educando desde la vocación y desde el propio testimonio del educador, creando así juntos la escuela.
El pensamiento católico da unidad de sentido a todos los valores, teniendo en cuenta que la gracia no hace más que perfeccionar el poder de la naturaleza, pero no la niega. Así, este último sentido religioso dota de equilibrio y profundidad a los valores humanos.
IDEARIO
- Formación religiosa-humana y científica adecuada a la sociedad de nuestro tiempo.
- Formación de la inteligencia e interés por la adquisición de hábitos que sienten la base de una educación permanente.
- Apertura a los valores trascendentes de la Fe.
- Desarrollar la creatividad.
- Poseer una buena organización que facilite resultados adecuados.
- Una disciplina académica adecuada.
- Un alto nivel de estudios.
- Que los alumnos se desarrollen en un clima de total confianza, libertad y bendición.
CONSOLIDACIÓN
Tras años de búsqueda del lugar que Dios había pensado para llevar a cabo el proyecto en el año 1999, su presidenta Dª. Concha Hervás escribía:
“Os transmito una buena noticia, gracias a Dios ya está aprobado el “Colegio San Vicente Ferrer” de Lima (Perú). Se inicia con 4 unidades e irá aumentando en lo sucesivo. Se seguirá el ideario de nuestros estatutos. El atraso cultural que hay aquí es grandísimo y es mucho el bien que se puede hacer a través de este colegio enseñando y educando religiosamente a los niños desde temprana edad.
Hemos de sentirnos felices porque Dios ha contado con nuestra colaboración a tan hermosa realidad. Cuando un cristiano toma conciencia de su Fe, se hace misionero. Este comienzo nos empuja a ser constantes en apoyar esta OBRA que Dios ha puesto en nuestro camino. Este ha sido nuestro principio, y como nuestros ideales tienen que ser tan altos como las estrellas, “confiamos en poder empezar a funcionar también en nuestra querida Valencia atendido por el plantel de maestro jóvenes que se van formando en nuestra tan querida Asociación.”
OBJETIVO DEL CENTRO
Desde el año 2.000, se inició el curso con una solemne eucaristía presidida por el señor obispo Mons. Lino Panizza, se bendijo a los niños y familias, se les regaló una crucecita y se bendijeron las instalaciones. Se consiguió que los alumnos no pagasen nada.
El objetivo del centro estaba muy definido: formar hombres con una gran personalidad cristiana aptos para mejorar la sociedad en la que vivimos.
EN LA ACTUALIDAD
El centro sigue en continua expansión, aumentando año tras año ininterrumpidamente las aulas y el alumnado y aunando la buena educación y la formación religiosa, piedad y letras como nuestro Santo Patrón anhelaba.
Bendito sea Dios.